Velando armas

River Plate y Tigres de UANL se encuentran velando armas antes de disputar la gran final de la Copa Libertadores en el Estadio Monumental Antonio Vespucio Liberti.

El club con más títulos locales en Argentina ha llevado un camino duro y sinuoso y espera coronarlo con el máximo trofeo del continente. El River descendió a la Segunda División de Argentina en junio de 2011, tocó fondo, y se impulsó para regresar a la máxima categoría después de una dura pelea en la división de ascenso que se decidió hasta la última fecha del torneo. Una vez en Primera División comenzó a tirar fuerte hacia la cima, un subcampeonato y un 17o lugar en 2013 pero en 2014 logró alzarse con el título del Torneo Final de Argentina bajo las órdenes de Ramón Díaz.

El Pelado Díaz, viejo conocido de la afición mexicana, renunció y los directivos del River optaron por Marcelo Gallardo quien tomó la base del plantel que había sido campeón con Díaz y lo transformó en el equipo aguerrido y pundonoroso que es hoy para guiarlo al título de la Copa Sudamericana y ahora a la gran final de la Copa Libertadores.

Los Tigres comenzaron su actual ciclo mucho antes, en el Apertura 2010, cuando contrataron a Ricardo Tuca Ferretti quien primeramente sacó a los Tigres de la zona del descenso y convirtiéndolos en constantes protagonistas para las liguillas del futbol mexicano, peleando por los primeros lugares en lugar de preocuparse para salvar al equipo. Los Tigres conquistaron el título del Apertura 2011 al derrotar a Santos Laguna tanto en el encuentro de ida, en La Comarca, como en el de vuelta, en Monterrey, con un marcador global de 4 goles contra 1 para luego quedar fuera de la Libertadores a la primera de cambio al utilizar jóvenes y ser eliminado por la Unión Española. En el 2014 fue subcampeón de Liga y campeón de la Copa México pero sufrieron por la irregularidad.

Tanto Marcelo Gallardo como el Tuca Ferretti buscan cerrar el ciclo con sus respectivos equipos conquistando la corona de la Copa Libertadores. Han sido caminos muy distintos pero los han conducido al mismo punto y ahora tendrán que enfrentarse para dirimir si River conquista su 3a Copa Libertadores, o bien los Tigres alza su 1er título internacional.

Marcelo Gallardo se ha distinguido al implementar un estilo aguerrido y ofensivo en un River que siempre se había caracterizado precisamente por eso mismo y esto ha tenido un efecto muy grande en su afición. En el partido de ida fue cauto y apostó por el empate, que fue el 3o en fila ante los Tigres, lo que nos deja claro que las fuerzas entre ambos equipos están niveladas, pero ahora tendrá la responsabilidad de llevar el peso del partido y seguramente buscará un mayor protagonismo para poner a prueba los nervios del equipo visitante que parece empeñado en presentar una dura batalla táctica y psicológica al optar por trabajar en las instalaciones del Boca Juniors.

Así las cosas, River Plate y Tigres de la UANL velan armas en espera de comenzar las hostilidades en el Monumental Antonio Vespucio Liberti para definir al campeón de la Copa Libertadores de América.