Los Tigres de la
Universidad Autónoma de Nuevo León vencieron por la mínima diferencia a las
Águilas del América en un partido cerrado, parejo y muy disputado ante un gran
ambiente en el Estadio Universitario de San Nicolás de los Garza.
Tal y como se
esperaba, ambos equipos privilegiaron el orden y buscaron nulificar al rival
dando por resultado un partido trabado, con muy pocas opciones de gol y con
mucha lucha en el medio campo pero una gran jugada de Damián Álvarez le
permitió al conjunto universitario tomar ventaja en el partido de ida de la
gran final del futbol mexicano en el Torneo Apertura 2014.
El partido fue de
músculos y posicionamiento más que de futbol. Ambos técnicos jugaron sus fichas
estratégicamente en busca de cerrar los espacios y obstaculizar los avances del
rival y vaya que lo consiguieron. El América poco a poco fue apagando el grandioso
ambiente del Volcán y convirtiendo los bailes y porras en suspiros.
En la primera parte,
el volumen de juego en las áreas fue casi nulo y esto no varió gran cosa para
segunda mitad ya que ambos equipos parecían conformes con el 0-0. El América
plantó un esquema con 5 defensas que le habían estado funcionando bastante bien
en la Liguilla pero esta vez, Ventura Alvarado se las vio negras ante la
velocidad y habilidad de los atacantes universitarios que lo hicieron ver mal
en más de una ocasión y tanto fue el cántaro al agua por el sector derecho del
América que, cuando corría el 63', Damián Álvarez desbordó por la banda y dejó
en el camino a Ventura para mandar un centro preciso, justo a donde estaba
Joffre Guerrón quien saltó en medio de tres defensas para anotar, de cabeza, el
único gol del partido.
Hasta ese momento,
tanto Moisés Muñoz como Nahuel Guzmán habían logrado contener todos los
intentos de disparos que iban con dirección a portería y la gran jugada de
Álvarez desequilibró un encuentro que parecía imposible destrabar pero ni por
verse abajo en el marcador el América cambió su esquema y las Águilas
mantuvieron la formación y el estilo de juego hasta el final.
En la recta final
del encuentro, Mohamed mandó al terreno de juego a Michael Arroyo en busca de
más velocidad y vértigo en los contragolpes americanistas pero si bien el
delantero azulcrema logró generar esperanzas, estas no cristalizaron y los que
estuvieron más cerca del gol fueron los Tigres con otra faena de Damián sobre
Ventura pero que en esta ocasión no encontró un compañero para cerrar la pinza.
Esta vez no hubieron
jugadas circunstanciales ni descuidos defensivos por parte del rival y la
defensiva de Tigres supo imponerse en las muchas aproximaciones a balón parado
en las que las Águilas han mostrado más peligrosidad, por lo que el cronómetro
mantuvo su inexorable avance hasta decretar la victoria del conjunto felino que
buscará agenciarse el título en el Estadio Azteca ante unas Águilas que ya
saben lo que es irse al partido de vuelta con la desventaja de 1-0 en el
marcador.
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